El italiano Ivan Basso relegó al olvido el calvario que vivió en 2006 como implicado en la Operación Puerto y reanudó en Verona su historial victorioso al conquistar el Giro de Italia cuatro años después de su primera victoria en la carrera rosa.

El español David Arroyo (Caisse d'Epargne) conservó su privilegiada segunda posición en el podio final después de la contrarreloj de 15 kilómetros con la que acabó el Giro y en la que se impuso el sueco Gustav Erik Larsson con un tiempo de 20:19.

El italiano Vincenzo Nibali, lugarteniente de Basso en el Liquigas, defendió con éxito su tercera plaza en el podio.

Basso cerró su gran actuación en el Giro con el decimoquinto puesto en la etapa y Arroyo acabó en el puesto 47, a 1:18 del vencedor.